Fiesta infantil para higienizar el barrio del Santo Ángel

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[ Lunes, 24 Diciembre 2012 16:57 ]

El sábado 15 de diciembre será uno de los días que los niños, padres y vecinos del barrio del Santo Ángel nunca olvidarán. A partir de las 10 de la mañana comenzó el taller infantil: “Cuido mi barrio arreglando mi casita por dentro y por fuera”, como parte del proyecto de la cooperación internacional Actuaciones de conservación para la habitabilidad del patrimonio arquitectónico de La Habana Vieja.

El niño Ángel Alejandro Hernández, quien condujo el encuentro, presentó las entidades promotoras: la Dirección de Cooperación Internacional y el Plan Maestro, de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana y el líder del proyecto comunitario Artecorte, Gilberto Valladares (Papito).

Liliana Pino, especialista de Cooperación Internacional explicó a los participantes que el taller persigue sensibilizar a los niños en el cuidado de su entorno. Posteriormente la especialista del Plan Maestro, Clara Susana Fernández abordó el concepto y la importancia del patrimonio cultural, los valores de las vecinas Iglesia y Plaza del Ángel, del sistema de fortificaciones coloniales, especialmente del Castillo del Morro, entre otras curiosidades que despertaron el interés de los menores.

Al compás de la canción Mi naturaleza, interpretada por Daylin Roche, los niños cantaron y bailaron para luego reflexionar sobre la importancia de mantener la higiene, arreglar las viviendas y realizar otras actividades que ellos pueden hacer como parte del barrio del Santo Ángel y del Centro Histórico.

Muchas fueron las manos levantadas tras la pregunta ¿cómo contribuyo con mi casita y mi barrio? Algunos respondieron: cuidando la limpieza, pintando la casa, barriendo las calles, no votando la basura fuera de los contenedores, colgando adornos lindos en las paredes de la casa.

Los niños desarrollaron acciones artísticas a partir de la invitación del conductor “a dibujar, a hacer alguna poesía o composición donde expongan sus casas, su edificio,  vamos a creer que somos grandes escritores, excelentes poetas y extraordinarios pintores y hagamos muchas hogares, edificios, pintemos con colores y palabras nuestro entorno, nuestro barrio”.

La fiesta-taller terminó con juegos deportivos, exposición de dibujos, confección de textos, regalos para todos y la expresión: “Todos le damos gracias a la Oficina del Historiador, a nuestros vecinos, a Papito por este día tan bonito, por mostrarnos la manera de arreglar mi casita, por dentro y por fuera”.

Por Maidolys Iglesias
Edición María Victoria Pardo